junio 30, 2009

Escape sin salida.

Te extraño como el antiguo sofá de la esquina de nuestro living extraña a su vieja funda que maloliente y mojada por la orina del bello gato burdeo que vive con nosotros ha perdido.
Ahora contempla de lejos el pasar y sentar de la gente sobre sí que sin protección le molestan los saltos gritos manchas y movimientos múltiples que los convivientes tienen sobre él y su tan hermosa presencia que sin poder decir nada como el burdeo del gato se queda inmóvil pero inmensamente inquieto contemplando toda acción que tienen en la habitación escuchando todo sonido y gemido posible. Variados ruidos le deterioran su piel tan cándida en antaño tan sórdida actualmente producto de toda esa muchedumbre de seres vivos que sin pensar en los sentimientos de quien vive arrinconado en esta parte de la casa le dañan cada vez que se aproximan.

junio 28, 2009

La lluvia alegra los rostros de las personas que lo único que buscaban era un correr para que salte agua y mojarse un poco la cara para fijarse que en realidad están empapados.

Qué, si finalmente terminamos en cajones individuales.

Porque las estupideces vuelan a nuestro alrededor, convierten a todo hermoso caminar en un absurdo.

Angustiante paso, moribunda persona. Tristeza plasmada en sus oscuros y mojados ojos, la lluvia indica el rumbo. Moja el paso. Amada y despreciada gota que moja el cabello, la frente, las cejas, mis ojos, las mejillas y culminan en un ¡splash! Al topar la boca y luego caer por el mentón hacia el sin-destino. Aquél camino, pisoteado, manoseado y sin ley, es el que nos atrapa. Sus enormes tentáculos que no nos dejan escapar, nos presionan hasta pensar en auto-aniquilarnos antes de morir por afixia. Firme una pistola en mi mano derecha apunta mi cabeza, la apoyo entre mis ojos y pienso en lo divertido que sería el mundo sin colores.

junio 15, 2009

Acechándome.

Envuelto en no-lugares, revuelto de aire sucio. Inmerso en angustia responsable y electiva, solamente con pasos por dar, ninguno hacia atrás. El progreso y desarrollo me manejan. Me enloquecen. Papeles, cuentas, dinero y burocracia. Alrededor un tono gris toma el poder del pasaje, donde los perros callejeros caminan, algunos con sólo tres piernas. Otros ni ladran.
Gente pasa desapercibida, avanza en su rutinaria vida y no deja espacio alguno para detenerse. Su abrumadora brisa deja una fuerte estela al pasar, edionda. Absurda y delirante. Donde los gatos maullan y los gallos cantan. Los colores se entremezclan en las veredas, donde todo se torna grisáceo, completamente oscuro, el negro lo domina. Manipula cada paso, cada mente, todo caimnar. Los caminos van hacia el mismo rumbo, donde nadie queda excento de las garras del oscuro color. Ese abismo que se acerca a nosotros, para culminar entre cuatro paredes del tono que se quiera, sin embargo, trascienden las cuatro paredes que comienzan a encerrarte, la blancura de ellas, la limpieza, su constante belleza, sin mensaje alguno. La ilusión de todos nosotros reflejada en ese cándido lugar, blasfema entre nosotros.
La verdad corrupta, donde el dinero fácil y el lavado de cerebro nos unidemensionan la vida.